DÓNDE: MAPA AUTOBIOGRÁFICO DEL CREADOR


Por Lázaro Benítez Díaz

Vuelve cada año a Santa Clara la esperada Temporada Danzaria, Para bailar en casa del trompo, bajo el auspicio del Consejo Provincial de las Artes Escénicas de Villa Clara y la Compañía Danza del Alma. En esta XIII edición la tarima, ubicada frente al museo de Artes Decorativas, y el teatro La Caridad fueron testigos de las diversas expresiones de la danza contemporánea a forma y gesto de las compañías invitadas.
Foto: Carolina Vilches
Para finalizar la temporada, Danza del Alma, reserva una nueva pieza. En esta edición con dramaturgia y coreografía de Nelson Reguera se presentó el 18 de diciembre en el teatro La Caridad la pieza Dónde. Suerte de mapa autobiográfico que el creador construyó para los intérpretes de la compañía.
La escena está desprovista de cualquier escenografía, convergen los bailarines en el espacio con sus cuerpos. En el suelo un cuadrado blanco, cuadro que como metáfora se transforma en país, ciudad y casa. Nelson, es natural de Santa Clara, desde los 20 años es un emigrante, primero La Habana, luego Australia, Francia y Bélgica. Esta condición le ha permitido conocer diferentes formas de asumir la danza en Cuba y el mundo, dentro de esa lista se encuentran Rosario Cárdenas, la compañía de Pal Frenak, o Thierry Smith. Ese ir y venir no sólo está referido al territorio sino a poéticas, cuerpos, lenguajes, así lo muestra la obra con imágenes que se fragmentan y entran a la escena una tras otra, convirtiéndose en los diversos mapas de su vida. El cuadrado no es más que una justificación para recordar de dónde se es, una marca, un símbolo que está dentro de la puesta pero que no es un impedimento para que los intérpretes dancen libres por el espacio. La pieza vuelve de cierta manera sobre toda esa memoria corporal.
El coreógrafo se presenta en la escena a través de los cuerpos de Yariel Carvajal y Osbiel Lazo, ellos son la voz del creador, él se presencia, está ahí, manipula los cuerpos. Dos solos coreográficos desgarradores. Que hablan de una vida, que se evidencia entre composiciones complejas, difíciles.
Foto: Carolina Vilches
Dónde se mueve en los diseños coreográficos de tríos y dúos, pocas veces vemos la escena con un solo intérprete, quizás sea un deseo o un miedo de Nelson. Es una obra que llega en un buen momento para Danza del Alma. Nuevos intérpretes con la formación danzaria de nuestro tiempo, contaminada en gran parte de las expresiones de la Post Modern Dance, se enfrentan a los clásicos de la compañía, Skate, La pared, Pelotón de nueva era, entre otros. En muchos casos, los clásicos interpretados por la nueva ola de bailarines, quedan lejos de quienes lo interpretaron como Nikolay Almeida, Greisier López o Jean Michel Díaz. Ahora estas nuevas voces se colocan desde otra realidad.
Aunque sea la primera pieza que Nelson Reguera construye de 45 minutos, Dónde no es un acto de prueba. Su experiencia como intérprete le permite conocer la escena y cómo moverse en ella. Establece un discurso desde su historia, una vida que la traduce en movimientos, acciones e imágenes. Al final nos dice que todo es un recorrido en espiral. Los bailarines terminan en un gran círculo, todos en el suelo, excepto uno. Todos sin ropas, sin historias, cuerpos listos para volver a escribir sobre ellos, semejante a un viajero que marcha hacia nuevas tierras.
Es la idea de recomenzar desde el punto de inicio, sobre lo que vuelve constantemente la obra. Nelson es también de Santa Clara, aunque sus múltiples nacionalidades confundan su historia, no lo hará su cuerpo. Por eso termina así, desnudo, abierto, vulnerable, quieto. De repente el apagón, se encienden las luces y vuelven los bailarines vestidos, ha terminado la función.


Comentarios